Hay que educar a nuestro cerebro.

Tengo amigos, familiares y colegas de trabajo que se que me aprecian y como es natural, me rotulan curiosamente de formas distintas, unos me tildan de esotérico, otros de centrar demasiado mis argumentos en torno a los descubrimientos científicos y mi verdad, que desde mi solitaria perspectiva, y en definitiva mi última verdad, es que estoy en ambos lados pues pienso que, hoy en día lo místico y lo científico generalmente se pisan la cola mutuamente. En este caso mi alegría es plena al encontrar personas cuya formación es profundamente científica, específicamente en el ámbito de la medicina, me refiero al Dr. Mario Alonso Puig, Cirujano, quien dice: “Lo que el corazón quiere, la mente se lo muestra”. Sus estudios en Psiconeuroinmunobiología, lo han llevado a conclusiones maravillosas como la que señalo en el título de esta breve reseña "Hay que educar a nuestro cerebro" ¿para que?, pues para ser feliz, para realmente aprender, para disfrutar de este regalo que es la vida, pero aunque estas frases no parecen nuevas, de lo cual concuerdo absolutamente, es penoso constatar que aun siguen vigentes pues no se ha logrado como objetivo en la mayoría de las culturas de nuestro mundo.

Bueno, y a que nos invita el Doctor; a realizar preguntas distintas a las habituales, a dejar de centrarnos en el cortoplacismo, a dejar de culpar a los otros por nuestras desdichas ya que con ello solo acumulamos razones y justificaciones y en definitiva, no logramos resultados, a cuidarnos de nuestro lenguaje pues es la verdadera esencia de lo que realmente somos.

Los invitos entonces a ver esta entrevista que espero esclarezca lo anteriormente expuesto: